Walter Marquez Pesca deportiva

Una pasadita por el shop de Pescarinfo, en estos momentos de tanta efervecencia pesqueril puede desembocar en una salida, a algun lugar nuevo y misterioso como a un lugar cercano y conocido, a un lugar a cientos de kilómetros de casa como a un lugar a 20 minutos de nuestro hogar.

Entonces, al llegar al shop y conversar con el Negro Pilips me dice, cierro al mediodía y nos vamos a la Usina a hacer unos tiritos. Dicho y hecho, cerramos y nos fuimos, sumando a dos clientes habituales de la casa Mariano y Diego.

Llegamos y había poca gente para ser sábado, supusimos que era porque la marea no estaba en su mejor condición y eso bajala la intensidad de los piques, igualmente armamos equipos y a castear.

Comenzamos con Lipless, como es lo usual, buscando repiquetear en las piedras lo mas cercano posible que permita el lanzamiento hacia el chorro de agua caliente que sale de la usina eléctrica. Por ello los lipless son tan buenos, buen peso, gran aerodinamía corporal para cortar el aire, o sea, se lanzan lejos.

Yo comencé usando un XR100 de la marca Xcalibur que empezó a dar resultados al cabo de unos cuantos intentos. El negro arranco con un Iron Head y tambien empezó, lentamente, a tener respuesta.

Nos fuimos moviendo y vimos que la actividad era espaciada, de a ratos salian lindos cabezones, de a ratos se calmaban. Nos teníamos que volver a mover y recuperar la zona de pesca. Evidentemente habían cardúmenes moviendose por la zona, mucho menos cantidad, pero los portes eran muy buenos.

Así seguimos probando señuelos. Yo cambié por un Clakin Rap 9 de Rapala y el negro comenzó a usar el XR75, el hermanito menor del que estaba usando yo, y tambien tuvo buenos resultados. Otra cosa a tener en cuenta es que a esta altura del año el agua ya no estaba tan fría en el resto del estuario, por ende no se acardumaban tantos peces como antes, menos comida, menos dorados, pero todavía estaban ahí.

Así seguimos durante ese par de horas de pesca tratando de perseguirlos, a estos lingotes de oro, que tanto nos apasionan. La pesca la seguimos haciendo con lipless, nada de innovar porque no estaban fácilesy era lo que mejor funcionaba.

Mariano y Diego tambien tuvieron sus capturas, yo los tuve un poco mas alejados, pero los vi clavar en muchas oportunidades y levantar pescados. Como el río estaba creciendo mucho nos tuvimos que meter bastante al agua para tratar de llegar a la zona donde mas se acardumaban que era mas cerca de la pared de enfrente en la usina, cerquita de los chorros de agua caliente.

Para el final me reservo la frutilla del postre. Llegado ya casi la hora de irno se me ocurrió probar un lipless que no había usado porque me parecía demasiado grande, de hecho es el lipless mas grande que tengo y que he visto.

Así pues, lancé a la cancha un Laser Eyes Magnum Rattle Shad de la marca Offshore Anglers, con 11,5 centímetros de largo y 42, si 42 gramos de peso es un lipless para los grandes dorados. Y sí, señuelo grande dorado grande dice el refran, a los 5 o 6 lanzamientos me atacó vorazmente un dorado de casi 4 kilos que me costó un perú sacarlo de las piedras sin perderlo. Tremendo dorado!!!!! y a 20 minutos de casa!!!!!

Ya con esa captura dimos el día por terminado. Unas 4 horas de pesca a tiro de colectivo es impagable, y mas si logramos dar con tan buenas piezas de dorados rabiosos y peleadores. Por otro lado que la situación sea cambiante le da un sabor mas satisfactorio a la pesca. Siempre es bueno trabajar por tus capturas y lograrlas, objetivo cumplido.