¡Gualeguay Incendiado!
Los Originales
Posteado el 24 Abr 2015 por Walter Marquez | ,
2015 viene siendo un año generoso en cuanto a la pesca. Tras la fascinante pesca de tucunarés en Colombia tuvimos una racha impresionante de excelente tarariras en la cueva del literato. Así pues con el otoño a plena marcha ya era hora de que aparecerieran ellos, los reyes del río.
La fecha que tuvimos que cancelar con Jorgito Cot en Gualeguay, porque se iba a pescar truchas gigantes al Strobel, la pudimos reprogramar y hacia allí fuimos. Con la esperanza de que el río estuviera decente y, mas no sea tuvieramos algunos piques, llegamos en tiempo y forma los originales. Si, para esta salida se dió el regreso, despues de mas de un año, de Telmo, El Ingles y quien escribe a Gualeguay.
Saludos de rigor y grandes abrazos despues de tanto tiempo que no veíamos a Jorgito. Lancha al agua y salida rauda hacia el río, donde ya nos había avisado el guía-amigo que la navegación era mas larga a cualquier otra que hayamos hecho antes. Por suerte pudimos amenizar semejante viaje con unos increíbles imperialitos (un bocadito dulce,casi etéreo, de dulce de leche) que trajo Telmo.
Ya en la recorrida entendimos el porqué no hay dorados por ningun lado del Paraná. El color chocolate, por lo sucio y revuelto, de este magno río no permite que trabajen los artificiales, por lo que la única opción es pescar con carnada, cosa que tampoco estaba fácil. Ya llevábamos mas de hora y media de navegación cuando llegamos a la primer cancha de pesca. Apenas llegamos nuestros corazones recuperaron los latidos. Ya fuera del río Paraná y adentro del Victoria, el agua estaba maravillosa, transparente, casi ideal para pescar con artificiales. Es increíble ver la confluencia de aguas donde se mezclan las aguas turbias del Paraná y las claras del Victoria.
Barranca preciosa y primeros lances. Yo venía con la idea de no usar tantas bananas alfers y probar otras cosas, aprovechando que justamente Gualeguay es un lugar donde se pescan barrancas profundas. Por ello arranqué con un señuelito maravilloso de rapala, el barra magnum. No fueron muchos lances antes de tener mi primer ataque fallado. Jorgito me preguntó si fue franco o un tac tac tac, al contestar lo segundo me dijo "palometas", este lugarcito tiene muchas dientonas. Yo mas que achicarme y desdeñarlas volví a lanzar y ajustando la clavada pum! arriba la primera palometa. A mi particularmente es una especie que me encanta pescarla porque es dificilísimo clavarla debido a su pequeña boca.
Al ratito entre tanta palometa tengo un pique muchísimo mas franco que casi me arranca la caña de la mano. Pelea violenta, sin ceder un minuto, vendiendo carísima su derrota para, finalmente, lograr ser izado donde recibe rápidas fotos de rigor y su devolución al agua. El primer dorado estaba arriba, y a los pocos minutos, unos metros mas adelante, pero en la misma pasada, El Ingles y Telmo suben sus primeros cabezones dorados.
Seguimos avanzando por la cancha, esta ves navegando unos minutos para buscar una nueva pasada. Señuelos al agua y Jorgito aprovechando que lo dejamos tirar un ratito clava un hermoso dorado con un power minnow 120 MR. Yo pongo uno similar y tras varios piques fallidos subo mi presa.
En un rato tuvimos mucha actividad en esa pasada, subiendo hasta un doblete con Telmo. La verdad que el amigo platense venía siendo el mas efectivo en la clavada de sus piques, y es algo que a veces pasa. Yo los clavaba bien, los peleaba y cuando llegaba casi el momento de izarlos para la foto se soltaban, es lo que yo llamo un día de dorados tímidos para las fotos.
Llegamos al mediodía rapidamente, en parte porque empezamos a pescar tarde tras tanta navegada, por ende decidimos parar a comer una tortilla española que hice la noche anterior regada con un riquísimo Zuccardi Q Malbec.
Ya con la panza llena volvimos a las andadas rapidamente. El Sr Abadía seguía onfire ya probando algun gordito casero paletón para peinar las barrancas desde donde arrancan. El Ingles decidió meter su power minnow para no perder pisada y tuvo premio inmediatamente. Yo erré mis piques, uno en la clavada y otro en una pelea preciosa que se liberó a metros de la lancha. Cada lugar qu encontrábamos con pique no era uno, sino en todas las cañas, eso suponemos que se debe a que estan en plena época de alimentarse y cazan en grupos para acorralar a sus presas.
Mas adelante llegamos a una zona donde el agua subía bastante adentro del campo asi que los paletones tuvieron que dajarse atras. Fue una zona de mucha actividad de palometas que disfruté pescando con una banana alfers paleta spinning.
Cuando volvimos a tener profundidad puse inmediatamente mi barra magnum que tantas alegrías me venía dando. Pero me iba a dar una mas grande todavia. Despues de errar unos piques de las últimas palometas de la palometa zone, llegamos a aguas mas profundas donde tuve un toque muy parecido a la palometa. Este lo logré clavar y resultó ser una hermosa lacha, gigante para la especie, que fue a parar a la lista de peces pescados con artificiales. Impresionante el Barra Magnum lo que estaba pescando.
Nuestro próximo destino fue un cruce de arroyos donde se formaba una gran playada, continuación de la costa, para caer en una barranca generosa. Los primeros lances sin respuesta hasta que Jorge me dice, mirá que vas a pasar por el veril, preparate. No terminó de decir la frase cuando un ataque furioso no terminó en captura por una clavada fallida. Tras de mi Telmo tiró al mismo lado y logró transformar al hermoso pez en pescado. Le dimos vuelta por la costa del otro arroyo que caía a la explanada y ahi tuvimos piques los tres a la vez, en una racha incontenible. Ninguno lo pudo izar, pero todos disfrutamos de las generosas peleas.
Avanzamos hasta la última cancha antes de empezar a volver sobre nuestros pasos y ahi si tuvimos actividad frenética, donde hasta pudimos subir un doblete con Telmo y donde tuvimos una seguidilla de palometas que nos entretuvieron por un buen rato.
Comenzamos el retorno y los chicos tienen una buena racha donde suben un par de dorados, inclusive un doblete, usando señuelos tradicionalmente paletones pero que no exigen tanto a la hora de recogerlos por su aerodinamia acuática. Uno de los mas ganadores en este estilo fue el Risto Rap 9 de rapala, que usó mucho El Ingles y que yo utilicé poquito ya que tenía otros ganadores en cancha.
Ante mi rato de ausencia de pique, cosa rara en este día, decidí volver a mi star. El Barra Magnum de Rapala, que no tardó en regalarme mi mejor dorado del día. Un pique furibundo, una pelea de esas que te ponen al piel de gallina, mi IMX de Gloomis 12-16 lb exigida al palo y finalmente un dorado de arriba de 4 kilitos izado para las fotos.
Vuelta a cambiar para pasar en una de las últimas correderas barrancosas y nueva captura de hermoso salminus maxillosus con el power minnow 120 MR de Marine Sports, otro de los ganadores de la jornada. Telmo vuelve a mostrar su efectividad con otra hermosa pieza capturada.
Ya para terminar nos fuimos a una canchita que no nos había dado dorados a la ida y que Jorge le tenia mucha fe. Una barranca hermosa que terminaba en un cruce de arroyos. Apenas caimos al agua las 4 cañas tuvieron pique que ninguno llegó a concretar. Los dorados estaban rabiosos y Telmo se dió el gusto de tirarle un popper, el Skitter Pop 12 de Rapala, a los dorados. No tardaron en atacarlo y de paso robarselo de la línea, por lo que Telmo quedó contento por el ataque y caliente por la pérdida.
Se nos hizo la noche y ek regreso fue largo, pero bajo una caida de sol majestuosa, fue ameno. La jornada terminó con 28 dorados subidos, y mas de 50 piques francos disfrutados, lo que se puede decir memorable. Gualeguay está incendiado, ojalá dure asi lo podemos volver a disfrutar.
