Bye Bye hoplias
Posteado el 23 Mar 2013 por Walter Marquez | ,
Finalmente llegan los primeros fríos y uno empieza a sentir que la temporada taruchera va llegando a su fin. Mas allá de que el año pasado las pescamos todo el año, este en particular yo voy cerrando filas porque no creo que vuelva a buscarlas salvo que el invierno se haga primavera.
Esta salida tambien significó el reencuentro con mi amado Gualeguay despues que en las últimas salidas recorrimos otros pesqueros, como San Nicolas o San Pedro, es mas recordando, en este 2013 no lo había visitado aún. Que pecado!.
El team se conformó con los habituales Angel, Telmo y quien escribe, pero Marianito no pudo venir asi que pudimos incorporar como suplente a otro Angel, el millo, que ya pescamos alguna vez con él, un gran tipo.
Llegamos a Puerto Ruiz tempranito y vimos el gran esfuerzo que esta haciendo esta comunidad para mejorar la infraestructura del puerto, algo realmente loable y que va en pos de una mejor antención a los pescadores y usuarios de embarcaciones de la zona.
El destino, como siempre en este hermoso pesquero, es incierto. Jorge tiene marcadas sus infinitas cuevas, donde despues de una horita de navegación llegamos a la primera y, a la postre,la única que relevaríamos este día.
Bajamos a tierra y caminamos unos cuantos metros, al llegar nos encontramos con el paraíso taruchero. Una pintura realizada por la mente mas enferma de la pesca de las taruchas se nos presentaba ante los ojos.
Laguna de unos cuantos metros cuadrados, donde a sus bordes se desarrollaba gran cantidad de camalote o lentejilla, donde la costa de enfrente estaba a tiro largo de caña, y donde en el medio la gambarrusa dejaba una línea de agua limpia de, quizas 30 a 40 cm desde superficie.
Esta preciosura de espejo, con tantos condimentos, puede ser un paraíso con el calor a pleno, pero con el frio y lluvia que soportó los días anteriores, se hace todo un desafio de ingenio para activar a las hoplias.
Arrancamos a la derecha del espejo, lo mas juntitos que podíamos para tratar de generar una zona bien marcada para activarla. Muy tímidamente algunas taruchas minis atacaron los engaños, en general latex con cucharitas del tipo bad line y una blade dancer jointed casera de Telmo.
Nos fuimos corriendo al medio con el mismo resultado, pocos piques, en los engaños con antienganche, y portes pequeños. Casi al mediodia vemos que Telmo, El Millo y Jorge se habían corrido a la derecha del espejo y estaban teniendo un pique mas sostenido. Nos arrimamos y acomodamos los 5 contra ese borde y ahi comenzó un rato de fiesta.
La forma era insistir e insistir donde se había producido un pique fallido, al cabo de 5 o 6 intentos mas volvía a atacar. Los engaños todo latex con antienganche en superficie o que baje un poco y algunos de superficie como el jiter o la rana de lures factory.
En este rato lo mejor fue las viejas ranas de marine sports, las popper frog, haciendo mucho ruido. Millo clavó un par de dinosaurios imponentes con este artificio que generaron gritos de admiración y de alegría para el debutante en estas tierras. Un gran pescador sin dudas.
Llegó el almuerzo y nos acomodamos bajo un hermoso sauce. Los matambres de pollo y carne que trajo el Millo lo colocaron en lo mas alto de nuestra estima y en lo mas bajo de nuestras dietas.
Descanso reparador, charla amena, risas de rigor, pero al cabo de un rato la ansiedad pesqueril pudo mas y volvimos a las armas. Empezamos tal cual la mañana por la zona de la derecha y ahora si despues de unos cuantos intentos encontramos el secreto de este lado...paseantes, y claritos!! Millo aceitó con un viper su muñeca y se hizo un festin, El ingles las encontró con un tiro larguísimo sobre la otra costa con un skitter walk de rapala, yo usé un super spook negro, que le costó un montón agarrar pique.
Lamentablemente cuando mejor estábamos de pique empezó a caer en esta zona de la laguna una florcita blanca, tipo un algodón, de los sauces, en la superficie del agua. Al recoger esta florcita se metia dentro del carrete y con el multi se enredaba terriblemente. Yo fui el que mas lo sufrió y me renegué tanto que dejé de pescar....por unos 5 minutos.
Nos corrimos mas al medio donde el agua estaba mas limpia, y acá hicimos uso de una trampita mortal. Hacia varias salidas que El Ingles venía amagando con volver a usar un ratito la boya plop con carnada, mas no sea como un simple homenaje a tiempos pasados donde nos hicimos pescadores de tarus gracias a ella. Hoy fue el día del revival.
Con algunos pedacitos del matambre de carne que sobraron, encarnamos las boyas plop y comenzamos a tirar. Los piques se suscedieron inmediatamente. Era plopear un par de tiros y que la boya se hunda. UN hermoso momento. Ya habíamos sacado todos nuestra taru con boya plop asi que volvimos a los lures.
Y fuimos al final a la derecha de la laguna, donde habíamos pescado muy bien a la mañana. Aunque el pique había mermado bastante el Millo nos volvió a clavar otro cocodrilo hermoso en nuestras narices...lindos escarpines de escamas nos tejió este muchacho!.
Terminamos la jornada cansados, pero satisfechos, fue una pesca difícil, muy pensada y tratando de usar todos los recursos que conocíamos. El resultado fue muy bueno,en un lugar que ni el mas enfermo pescador de taruchas pudiera haber pintado en un cuadro.
Cerramos oficialmente la temporada taruchera 2012-2013. Ojalá la reabramos prontito, aunque si hay algo que estamos extrañando y mucho son a nuestros violentos cabezones dorados.