Esquina tiene payé
Posteado el 21 Feb 2010 por Walter Marquez | ,
La leyenda del payé Correntino dice que todo aquel que pise sus tierras quedará embrujado y por mas lejos que se encuentre siempre sufrirá de añoranzas de esta tierra. Cual gualicho de enamorado "el payé" nos obligará a sufrir su ausencia y a querer volver siempre volver a ese terruño mágico. En perfecta sincronía con la mística de la pesca del dorado, estas esotéricas influencias me obligan desde hace unos años a volver a esta maravillosa tierra y sobre todo a mi primer amor correntino..Esquina.
Al grito de vamos don Betosantos me pinchó para hacerle una visita, sumando a su hijo Demian y a al amigo Eduardo,a quienes encontré en la estación central de micros de Retiro para tomar el servicio deluxe de Flecha Bus. Al cabo de unas 8 horas llegamos a la maravillosa ciudad de Esquina donde rapidamente nos dirigimos hacia la posada de Laurito, lugar elegido siempre para parar aqui.
Despues de una cena y un sueño reparador nos vino a buscar al mismisimo embarcadero de la posada nuestro guia estrella Mario Borda, excelente profesional y mejor persona, con quienes nos embarcamos rapidamente para despedirnos del paye esquinense por un rato y embarcarnos en el embrujo dorado.
Primer dia : Payé embrujador
Salimos directamente al río Paraná, aguas abajo, rumbo a la zona del Ingá. Hicimos unos primeros intentos en la zona de las barrancas del Paraná mismo, tanto con carnada viva de morena como con algunos artificiales, pero con suerte esquiva.
Decidimos despues probar en una buena cancha que eligió Marito, en un banco que nos llevaba a una caída de agua pronunciada. Las líneas fueron al agua con mamachas, bien grandes, enhebradas en anzuelos 10/0. La forma de pesca fue pindá, o sea gareteando por el medio del río con la carnada bien lejos de la lancha.
Al cabo de un rato de garetear y cuando habíamos pasaddo por el comienzo de la caída de agua, siento que la linea se afloja, recogo para tensar y se vuelve a aflojar. Marito al ver esto me dice, tenes dorado en la linea, se te esta viniendo para el bote, no lo cañes hasta que lleve firme. Así pues lo esperé y lo esperé mientras iba recogiendo línea para dejar siempre un mínimo de tensión. Pasó por debajo de la lancha y ahi si con correntada a favor tensó bien la línea y corrío. Clavada violenta y certera, saltos furibundos y finalmente primera pieza obtenida de un hermoso doradito de unos cuatro o cinco kilitos. Belleza.
Contento con el resultado de la pasada Marito decidió hacer otra pasadita al banco. En esta oportunidad tuvo su premio Demián con un hermoso dorado que lo hizo saltar de la lancha de la emoción en un pique franco de corrida violenta en el carretel, nada de timidez para este salminus maxillosus.
Llegamos al final de la cancha y subimos una vez mas. En esta oportunidad al que se le aflojó la línea y lo llevó a pasear un rato fue a Beto que, paciente como es él, lo esperó y lo esperó. Cuando el muy ladino tomó coraje y como un tractor salió disparado, fue prepoteado por la violenta clavada de Beto.
Decidió el amigo Marito hacerle una última pasada antes de ir a almorzar a la isla y la verdad esta fue la que mejor pagó. Al principio del banco todos tuvimos piques que no logramos clavar por la falta de virulencia de los dorados y que nos hizo clavar en falso.
Pero ya en el medio del banco Demián pudo clavar otro hermoso rey pez que presentó dura pelea y ya llegando al final con Beto metimos un precioso doblete que nos desparramó de lado a lado en la lancha. Realmente gloriosa esta mañana pesqueril.
Despues del tardío almuerzo en la isla donde disfrutamos de un regio asado morocho, regado de tinto malbec y cerveza helada, partimos a tirar unos lances mas por la tarde.Nos fuimos en busca de el correntoso para hacer unos lances al golpe de mamacha sobre la costa con poca respuesta asi que antes de terminar el día le hicimos un tiro a la boca del arroyo kerosene que tanto nos gusta pescar. Ahi mismo en la confluencia del agua tuve un pique precioso en pindá que me regaló tremenda pelea y terminó siendo el último pez de la jornada.
Ya en tierra llegamos a la Pousada donde el mismísimo Laurito nos recibió con el fueguito prendido y la promesa de un fabuloso asado. El mismo transcurrió rodeado de anécdotas e historias correntinas de las buenas y con la grata compañia de Laurito y su amable señora. Ya cansados nos fuimos a reposar para la segunda tanda de mística dorada que se iba a dar mañana.
Segundo dia : Mística dorada
Nos levantamos con el mismo clima del día anterior, nublado y ventoso. Marito pasó temprano por lo de Laurito y salimos a navegar rápidamente. Arrancamos en el Paraná golpeando barrancas donde obtuve una pieza de pequeño porte con un cascarudo de NG y donde Eduardo por fin pudo debutar con un lindo dorado con una mojarra NG.
Fuimos aguas abajo hasta el banco que ayer tan bien nos había rendido donde le hicimos una pasada y Demian tuvo un precioso premio dorado. La volvimos a remontar para hacerle una segunda pasada sin suerte. Intentamos una tercera y tampoco hubo actividad, ya la habíamos "secado" asi que seguimos aguas abajo.
Ya con algunas piezas en nuestro haber nos fuimos a almorzar temprano esta vez asi le dedicábamos mejor tiempo por la tarde. La comida fue una fritanga de pescado hecha en la morocha (olla de hierro forjado negro). Una de las mejores formas de comer pescado que probé en mi vida.
Ya con la panza llena nos acercamos hasta el arroyo el kerosene donde primero le hicimos unos tiros a la boca misma donde anclados tirábamos la mamacha para que vaya derivando desde donde largaba agua el arroyo Una pesca infalible, al cabo de un rato primero me tocó a mi sacar uno tras otro un par de dorados que estaban acechando la corredera bajo los árboles. Al rato Beto emboca su dorado en la boca del kerosene.
Cuando se calmó la actividad en la boca decidimos remontar el kerosene y largarnos en lento garete por dentro del mismo. Al rato de ir navegándolo tuve un hermoso pique de surubí que me peleó durante un buen rato y me lo escupió cuando ya le faltaba poco para subir. Calenturas al margen remontamos de nuevo y nos largamos.
En esta recorrida primero, apenas empezamos Beto tuvo una hermosa corrida de surubí que no pudo clavar y casi llegando a la boca primero Demian y luego Eduardo concretar capturas de dorados. Al final de la boca del arroyo y con paciencia Beto tuvo su captura dorada del Kerosene.La boca del arroyo fue muy rendidora sin lugar a dudas.
Una última remontada y en la mitad del garete la línea se me afloja, recogo y tenso, se vuelve a aflojar, asi estuvimos desde la mitad del arroyo hasta la boca donde el dorado con la mamacha en la boca venía siguiendo la lancha sin decidirse a correr. Una locura. Por suerte cuando llegamos a la boca misma el señor amarillo se retobó y salió disparado hacia afuera, ahi mismo me afirmé y lo clavé con fuerzas. Una pelea maravillosa me regaló este hermoso pez que fue el último de la jornada.
Volvimos maravillados de otra buena jornada de pesca en este lugar tan maravilloso que tanto amamos. Sin llegar a ser aquellas pescas que te cuentan los mas viejos donde los dorados se subian a la lancha, este pesquero sigue rindiendo y dandote la posibilidad de lograr buenas capturas de varias especies deportivas y con distintas técnicas de pesca. Por algo tiene Payé Esquina, por algo será.